Siempre escuchamos a gente que habitualmente se excusa en que no le llegan las horas del día para hacer las cosas, esta semana una vez más he comprobado que eso no se ajusta a la realidad en absoluto, tan solo es una mera excusa en la que algunos se escudan.
Cierto es que el tiempo es oro, y me he tenido que repartir los horarios de distinta manera, haciendo buenos entrenos y en muy buena compañia.
Seguimos sumando entrenos, sensaciones y alegrias.
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