Acabamos de salir del confinamiento, solamente pensamos en disfrutar de la montaña, de todos esos entrenos que no hemos podido realizar, y esa montaña ya no está tal y como la dejamos meses atrás. Del frío hemos pasado al calor, y de los colores oscuros hemos pasados a los verdes más intensos. La población de animales en las montañas y bosques es más numerosa, y con ellos la presencia de las garrapatas, y es relativamente fácil que alguna de ellas se suba a nosotros al atravesar zonas de hierba alta o de frondosos helechos, es por ello que debemos ser más precavidos que nunca, y evitar que esto suceda, a mi quizás sea una de las cosas que más miedo me da de correr por zonas así, ya que conozco unas cuantas personas que han sufrido la enfermedad de Lyme y es algo muy serio.